una edad

“Tengo que beber café- anuncia mi madre. Los deseos de mi madre son simples pero no son negociables. Ella los vive como necesidades. Ahora mismo, ella tiene que beberse una taza de café. No habrá desvío de este deseo que ella llama necesidad hasta que una taza de líquido humeante esté en su mano siendo levantada hacia sus labios.” ~ Vivian Gornick, Apegos feroces

Carta del 14 de octubre del 2021

Estoy a un par de días de cumplir una edad. Todxs cumplimos eso cuando cumplimos años, de hecho, es el objetivo, pero se sigue escuchando por las calles: una edad y una se sabe dentro de lxs afortunadxs en llegar.
No temas, no lo sufro, en líneas generales siempre disfruto de cumplir años.

Lo que sí quería hacer, a raíz de este acontecimiento vital es reconocer aquí y ahora que, la edad que estoy a punto de cumplir, me aleja de escribir sobre temas actuales o "en la onda". Es mi mayor deseo entonces que no te hayas apuntado a esta newsletter por su carácter moderno.

Y de hecho, no es tanto por la edad que voy a cumplir sino por referencias. Un ejemplo, tener Los Fogones Tradicionales del Canal Cocina como programa favorito para la ansiedad de los domingos es un delator de tener una edad y hacer observaciones del tipo: "pero señor, use una tabla que va a rayar el plato", también lo es. 

¿Te has preguntado qué delata tu edad pero de una manera positiva? Es decir, fuera de los achaques o llevar peor las resacas. ¿Deseos que se manifiestan como necesidades? Algo que forme parte de tu yo nuevo a quien le importan menos unas cosas y más otras. Si lo quieres compartir conmigo, me encantará saberlo.

Gracias por leerme,
 

Adriana